Querida Familia de Radio María:

El 15 de agosto celebramos la solemnidad de la Asunción de la Virgen María que desarrolla en su plenitud y colma de significado aquello que María, exultante de gozo, proclamaba en el Magnificat: “El Señor ha hecho en mí grandes cosas”

La Asunción es el corolario lógico para quien se ha hecho “esclava del Señor”. Cuando dejamos a Dios actuar en nuestra vida, cuando nos volvemos dóciles a su voluntad, cuando nos dejamos guiar por su espíritu, todo conducirá a la gloria.

Con todo, también es cierto que al comienzo todo radica en un acto de fe. Cuando Dios le dice a María por medio del Arcángel San Gabriel que será la madre de su hijo, seguramente lo que María puede ver en el horizonte son tormentas y oscuridad. Su amor a José amenazado por la duda, una sociedad que apedrea a las adúlteras, un mundo en el que las mujeres solas, viudas o abandonadas son extremadamente vulnerables e impotentes. Y sin embargo, María responderá Fiat, es decir “hágase en mí según tu palabra” y apenas unos días después en una explosión de júbilo en casa de su prima Isabel proclama el “Magnificat” que supone que todo lo que le fue anunciado de parte de Dios se cumplirá.

Sólo desde una profunda fe podemos proclamar el Magnificat cuando todo es oscuridad y cuando una espada de dolor atraviesa nuestro corazón. Y sin embargo, la fiesta de la Asunción nos muestra que lo que María era capaz de intuir en casa de Isabel y que estaba implícito en aquel niño que crecía en su seno, era cierto.

Queridos hermanos, dichosos ustedes los que han creído porque lo que les fue anunciado de parte de Dios se cumplirá. Les mando un fuerte abrazo desde los estudios de Radio María y les agradezco por formar parte de esta gran familia con sus oraciones, comentarios, aportes y donaciones.  Que el Señor Jesús los bendiga con la abundancia de su gracia y que María Santísima, interceda desde el Cielo por cada uno de ustedes.

Suyo, en Cristo,

P. Rafael Pelufo SJ
Director Editorial de Radio María Uruguay